
La impaciencia es un defecto común en todos los aficionados a los Wargames y juegos de mesa. Y más aún si anuncian las novedades con mucho margen hasta su lanzamiento.
Si a esto le sumas que se trata de tu juego favorito y de la nave que mas ganas tenias que saliera… el resultado es obvio:
Coger un Z-95 de la rebelión y repintarlo para que encaje con la nave que tiene para huir Bossk si logran destruir su Diente de sabueso