Qué la primera temporada de Daredevil me encantó creo que es algo que quedó patente en el post que escribí en su dia. Junto Mr.Robot, son dos de los estrenos imprescindibles de 2015 y que hay que continuar viendo. Pues bien, el 18 de marzo los buenos de Netflix pusieron la segunda temporada entera para disfrutar y creo que es hora de contaros cómo ha ido el retorno del hombre sin miedo a la cocina del infierno. Este post contiene todo tipo de spoilers, quedáis advertidos.

La segunda temporada empieza con un invitado muy especial: The Punisher. Los guionistas no sólo no quisieron especular con la introducción de este conocido, carismático y brutal personaje, sino que además le dan unos cuatro primeros capítulos fantásticos para que nos familiaricemos con su carácter y su metodología, llevando al Diablo de Hell’s Kitchen a unos dilemas morales que hasta entonces había obviado.

Cuando Matt Murdock pensaba que el resto de problemas con Frank Castle los iba a tener en el juzgado, aparece en su casa una exótica mujer: Ni más ni menos que Elektra. La joven ex novia del superhéroe invidente es capaz durante los siguientes cuatro capítulos, no sólo de posicionarse como otro de los grandes personajes de la serie, sino que además es el hilo conductor de la historia principal que nos quieren contar.

Mientras Murdock, Karen Page y Foggy intentan evitar la pena de muerte para Castle en los tribunales, Daredevil y Elektra se sumergen en una lucha contra una organización llamada La Mano. Stick, al que ya vimos la temporada anterior, será el encargado de guiarlos en esta batalla contra los ninjas de Nobu, el asesino inmortal al que también conocimos el año pasado, y ayudarles a frustrar sus malvados planes.

Parecía imposible pero los chicos de Netflix han conseguido que la segunda temporada sea mejor que la primera. Profundizar más en los personajes principales y en sus vidas era fácil, puesto que en la primera temporada dedicaron muchos más esfuerzos a la figura de Willson Fisk que a las suyas, pero crear secundarios a la altura de Kingpin parecía algo imposible y han sacado no sólo uno, ¡sino dos!

John Bernthal es, sin ningún tipo de dudas, el mejor Punisher que hemos podido ver en cine y tv. Un personaje atormentado y violento pero que realmente hace que nos planteemos si nosotros no actuaríamos de la misma forma que él dejando atrás las medias medidas de Matt Murdock.

Por su parte, Elodie Yung, dibuja a una alocada e inestable Elektra que trastoca completamente al héroe. Daredevil sabe que no debe, que es perjudicial para su vida personal, que no le va a llevar nada bueno, pero no puede evitar estar continuamente junto a ella, tanto por su carisma así como por su pasado juntos. Todos hemos acabado un poco enamorados de ella, admitámoslo.

Y cuando piensas que la serie no puede sorprenderte más aparece Fisk, en la cárcel, para tener un breve aunque intenso encuentro con Matt Murdock, y te dejan abierta una duda para tempoadas venideras: ¿Está Kingpin empezando a sospechar que Matty, el hijo ciego de un boxeador, puede ser Daredevil? ¿Nos están plantando la semilla de la adaptación del mítico y fenomenal Born again de Frank Miller?.

Voy a dejarme por contaros conexiones con otras series de Netflix, relaciones con el MCU, etc. para que lo podáis descubrir vosotros mismos si no lo habéis hecho ya. Como véis, muy completa y dejando el listón muy alto para la siguiente remesa de capítulos, a la que estoy esperando cuál vecino yonki de Jessica Jones a la espera su dosis.

Para acabar, incluyo el video de la escena que podría ser una metáfora sobre esta segunda temporada de Daredevil: ¿Recordáis aquella maravillosa lucha contra los rusos de la primera temporada, en falso plano secuencia, que también destaqué en su día? Pues este año la han hecho más grande, más larga y mejor.