SIETE EVAS: ¿QUÉ PASA CONTIGO, STEPHENSON?

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No es ningún secreto que Neal Stephenson ha sido, durante bastante tiempo, uno de mis autores favoritos en el campo de la ciencia ficción «dura». Novelas como Criptonomicón, Snowcrash o, especialmente, La era del diamante me hicieron caer rendido ante los encantos del escritor de Maryland en sus distintas encarnaciones. Tras leer su última épica, Siete Evas, sin embargo, me queda una sensación agridulce: ¿eran solo cantos de sirena?

Muerte y Resurrección del Cyberpunk, Cap. 10 : Resurrección

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Como la Mayor Kusanagi, el cyberpunk no ha muerto. Sólo ha mutado, cambiado de pieles. Ha efectuado una muy necesaria diversificación y, sobre todo, ha dejado atrás ciertos clichés que lastraban su desarrollo como género. Esto se ha debido en parte a que muchos de los horizontes temporales que presentaba se encuentran ya muy cercanos y el mundo ha evolucionado por otros caminos: la URSS se desintegró, no hay Colonias Exteriores más allá de la Tierra, las naciones-Estado se muestran reacias a desaparecer y no hay ni rastro de las nuevas religiones que debían darse: los viejos cultos monoteístas siguen ahí, algunos más fuertes que otros, algunos más radicalizados que otros.

Muerte y Resurrección del Cyberpunk, Cap. 1 : ¿Quién mató al Cyberpunk?

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Todos recordamos que «en el inicio fue la línea de comandos», y que «el cielo sobre el puerto tenía el color de una pantalla de televisor sintonizado en un canal muerto». Todos hemos leído novelas y cómics cyberpunk, visto películas, series, jugado a juegos de rol, a videojuegos algunos incluso dieron el paso y se convirtieron en hackers o (los menos dotados) en cybergoths.

Snow Crash, ciberpunk y rock & roll.

Snow Crash

Un virus informático que es capaz de reescribir el ADN humano, un hacker que trabaja como repartidor de pizza, una sociedad anarcocapitalista donde la Mafia Italiana es una franquicia respetada y los estados simplemente algo nominal, antiguos dioses sumerios y un villano motorista que lleva una bomba atómica a modo de seguro de vida en su sidecar. Todo eso y mucho más es el cóctel que Neal Stephenson propuso en su tercera novela, Snow Crash.

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